En vísperas del Día Internacional de las Niñas, la Embajadora de la Buena Voluntad, Emma Watson visitó hoy Malawi para brillar en un centro de atención mundial en la necesidad de acabar con el matrimonio infantil. Ella se reunió con los jefes y niñas que han regresado a la escuela después de que sus matrimonios han sido anulados. En 2015, Malawi aprobó la Ley de Relaciones Familiares, matrimonio y divorcio, y que a edad mínima para casarse han los 18 años. UN Women, junto a sus socios, jugaron un papel integral en la promocionan de esta nueva ley y que colabora con los jefes tradicionales para cambiar las prácticas laborales. En todo el mundo, UN Women aboga por la adopción y aplicación de leyes políticas que prohíban y prevengan el matrimonio infantil. También permite a las niñas conocer sus derechos y reúne a las comunidades a tomar una decisión contra las prácticas. La visita de Emma Watson le proporcionó una experiencia de primera mano sobre el trabajo que están haciendo los líderes mundiales en las comunidades para acabar con el matrimonio de niños y niñas y traerlos de vuelta a la escuela. En el distrito de Dedza, Emma se reunió con el jefe Kachindamoto, una defensora prominente de la lucha para detener el matrimonio infantil. La jefa recordó que una vez vio a niñas de 14 años con 2 hijos cada una y por eso sintió la obligación de tomar acción. En la escuela secundaria Mtakataka, Watson escuchó a niñas que han sido liberadas de matrimonio y que han sido devueltas a la escuela. Entre ellas estaba Stella Kalilombe, que describió como fue forzada a casarse a los 17 años cuando se quedó embarazada. Su hijo tiene ahora 4 años y por tener un marido abusivo que la llevó a volver a vivir con sus padres. Hoy en día la joven está decidida en terminar la escuela y ser maestra.
0 Comentarios