Hay directores muy prolíficos. Algunos como Woody Allen hacen una película al año y otros a los que les lleva más tiempo lo que quieren contar. Hace tiempo que asumí que encajo más en el segundo grupo. Lo explica Alejandro Amenabar que por primera vez, y en exclusiva para Fotogramas rompe el silencio ha mantenido durante cinco años transcurridos entre el estreno de Agora y el rodaje de Regression, su nueva película, en cuya postproducción se encuentra inmerso. La trama se situa en Minnesota, en el medio oeste estadounidense, en 1990 donde Bruce Kenner, un detective encarnado por Ethan Hakwe, investiga el caso de la joven Ángela, a quién da vida Emma Watson, que acusa a su padre (David Dencik) de un crimen inconfesable. Kenner, con ayuda de un psicólogo interpretado por David Thewlis, descubrirá una conspiración siniestra.
Explorando el Miedo
Regression pertenece a la categoría de thriller psicológico, cuenta su director, que me ofrece una oportunidad para explorar el miedo y los vericuetos de la mente. Nada me apetencía más. La cinta, con guión propio de Amenabar, es un co-producción hispano-canadiense rodada en Toronto y producida por Fernando Boivaira para Telecinto -Cinema, MOD Entertainment, Mod Producciones, Himenóptico, First Generation films y Telefónica Studios.
UN RETO PARA WATSON
Regression ha sido para Emma Watson, en sus propias palabras, un regalo de cumpleaños fantástico, ya que su primer día de rodaje coincidió con la celebración de 24 cumpleaños. Estoy muy emocionada con el reto que me supone como actriz este personaje ha declarado la protagonista de Harry Potter sobre Angela, una chica que denuncia haber sido víctima de los supuestos abusos sexuales de su padre.
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